20 mar 2011

OJOS TAPATÍOS 18 MZO


Cuántas ocasiones escuchamos un perdone usted, por cualquier barbaridad, claro siempre y cuando se tope uno con gente decente, se sabe de casos donde el “presunto culpable” (hay que andar al día pues) resulta que es inocente y con un clásico disculpe usted, se soluciona todo, aclaremos que eso no significa perdón. El fin de semana pasado, ocurrió una tragedia donde a causa de la presunta embriaguez de Pablo Mora Dragicevic, terminó con la vida de una mujer de 18 años, pese al presunto influyentismo del conductor, se le otorgó un perdón por parte de los padres de la joven que falleció en el accidente en la Colonia Providencia, ahí si ni un disculpe usted tiene cabida.

Como tampoco tiene cabida el hecho de que la llamada Ley Salvavidas tenga esos vacíos en los que fácilmente, cualquiera que se sienta hijo de Juan Camaney, libre de manera casi inmediata, los cargos que deberían imputársele, con la simpleza de decir que conocen y que se llevan de pellizco y nalgada con el gato de algún funcionario público de primer nivel, podría decirse que la suerte, la buena voluntad y la vida honorable de la familia afectada de la persona fallecida, estuvo de lado del presunto asesino, no creo que en el caso, de que esto le suceda a alguien de nuevo, le tengan las mismas consideraciones.

Consideraciones que parece ser que si dejarán de tener los del SIAPA a los morosos, esos que deben de 4 meses para arriba, lo que estamos por ver si es que aplica eso de “o todos coludos o todos rabones” porque siguen sin aceptar sus cobros la Universidad de Guadalajara y el Arzobispado, los ayuntamientos ya se están poniendo amarillos, el plan es cerrar unas mil tomas diarias para presionar al pago, me gustaría ver si es cierto tanto alarde y que los universitarios literalmente huelan a León y que el cardenal de la misa oliendo a chamuco.

Mismo que anda suelto y se le apareció al director de Catastro de Zapopan, José Fermín Rodríguez, quien fue amenazado de muerte con mensajes a su celular y una corona de flores tras detectar irregularidades en la dependencia a su cargo durante una auditoría, acordémonos de caso similar le ocurriera a quien fuera Director de Mejoramiento Urbano del Ayuntamiento de Tonalá, Carlos Romo Guízar en días de Jorge Vizcarra y que sabemos de sobra el final de la historia, ojalá y solo se trate de una broma de muy mal gusto.

Como de mal gusto es que tanto Emilio como Aristóteles se anden peleando como niñas de secundaria por el mismo chamaco, ya sabemos que mientras las obras sean para favorecer el trabajo del primer edil tapatío, el gobernador hará todo lo contrario para que esto ocurra, y que mientras sea para lucirse con planes presidenciales González Márquez se pondrá con brocha chiquita a pintar casas, enfundado en su camisa de las chivas, eso si de color azul chiclamino.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Pablo Mora Dragicevich es un mirrey asesino de mierda.
Le deseo lo peor